El olivar jienense sigue mirando hacia el Este. Hacia Europa y singularmente hacia Italia. Hacia allí, hacia ‘la bota’, salen todos los días cisternas y cisternas de aceite de oliva. Del excelente, del bueno y del menos bueno. Toneladas y toneladas. Los datos que proporciona la Agencia de Aduanas evidencian que esta estrecha -e intensa- relación de los aceituneros de Jaén con los envasadores de Italia cada año va a más. En 2011, por ejemplo, el 81,6 por ciento de las exportaciones realizadas por almazaras y cooperativas de la provincia terminaron en Italia. Mucho. Y la tendencia es que sea, aún, mucho más. En 2010, por establecer una comparación entre el último (2011) y el penúltimo (2010) ejercicio completo, este porcentaje se situaba en el 78,7 por ciento más. Casi tres puntos más. Un avance importante si analizamos cosechas similares en volumen.
¿Cuál es el problema? Pues que más allá de los grandes titulares, la realidad es que esta mayor dependencia de Italia no está reportando mayores beneficios. Todo lo contrario. Jaén gana menos con Italia, pero Italia sí gana más con Jaén. Verán. En 2010 se enviaron a Italia un total de 65.613.600 kilogramos a una media de 2,27 euros por kilogramo. En 2011 se mandaron 78.482.100 kilogramos a un promedio de 1,84 euros por kilogramo. Es decir, salió casi un 20 por ciento de mercancía más que, sin embargo, se vendió casi un 20 por ciento más barata. Un margen que, a la vista de cómo se tarifa el producto -convenientemente embotellado, por supuesto-, en Estados Unidos, Canadá y Japón, las tres plazas fuertes de las marcas transalpinas, van a parar fundamentalmente a los que embotellan, ponen el lacito y venden. O sea, a los italianos. Ya les sonará la musiquita. Los famosos ‘valores añadidos de la comercialización’.
Y es que, tal y como están las cosas, Italia sigue siendo muy necesaria para Jaén. Asume buena parte de los incrementos de producción que se vienen registrando en los últimos años. De hecho, las expectativas, a tenor de los números de enero y febrero, es que los 78,5 millones de kilogramos de 2011 se queden cortos en 2012. Con el agravante de que los 1,84 euros de 2012 -un 20 por ciento menos de lo que le cuesta producir un kilo a los aceituneros de Jaén- posiblemente también se quedarán cortos… aunque por debajo. Las ganancias para ellos serán, por tanto, mayores. Los ‘nuevos’ mercados en los que España y Jaén empiezan a tener un nombre -aquí sí, envasado- todavía distan un mundo de Italia. Hay que mirar muy abajo para toparse con un ‘cliente’ con unas cantidades medianamente representativas. Se trata de Portugal, con 5.453.400 kilogramos, aunque en este caso, al igual que sucede con Italia, también se ‘despacha’ sobre todo al peso. Allí se encuentra uno de los principales importadores, la compañía Sovena que, curiosamente, después provee a algunas de las principales cadenas de alimentación españolas. En la tercera posición se halla Francia, con 3.949.600 toneladas el pasado 2011. Lo dicho, un abismo respecto a Italia.
Gran esfuerzo
A pesar de ello, los fabricantes de Jaén están haciendo un importante esfuerzo por abrirse un hueco en países con gran potencial porque sus economías son emergentes y también en otros menos ‘golosos’ pero también interesantes porque el aceite de oliva se relaciona con España -y de forma inferida con Jaén- y no con Italia, como era costumbre. Tanto es así que, según la propia Agencia de Aduanas, el oro líquido ‘made in Jaén’ se distribuyó por más de medio mundo. Por 67 naciones. Un récord. Una cifra de la que no existen precedentes -en 2010 nos quedamos en 57-. Alemania, Brasil, Austria, Bélgica, República Checa… pero también otros destinos más ‘éxóticos’ como Angola, Emiratos Árabes Unidos, Gibraltar, Guam, Kuwait, Qatar, Sri Lanka, Singapur o Tailandia.
Información obtenida de:
http://www.ideal.es/jaen/v/20120607/jaen/revuelto-ganancia-italianos-20120607.html