Las marcas propias de aceite de oliva ceden terreno en la cesta de la compra de los españoles y las envasadoras tradicionales comienzan a acaparar una mayor cuota de mercado. Por otro lado, el precio en origen experimentó un ligero repunte en los últimos días.
Hace unos meses hubiera sido una magnífica noticia para el sector, ya que firmas como Carbonell, Coosur, Hojiblanca, La Masía, La Española y Borges se caracterizaron por no presionar demasiado la cadena de valor del zumo de aceituna, esto es, rehusaban competir con precios muy bajos. Sin embargo, ahora, esta nueva situación será digna de un estudio en profundidad, ya que muchas de las envasadoras tradicionales captan más clientes y acaparan mayor cuota de mercado, precisamente, porque sus botellas no difieren tanto de precio en las estanterías de las tiendas de las marcas propias de grandes supermercados. Por ello, lo que ocurra en unos meses con las operaciones a granel es un enigma, aunque, a priori, que estas firmas ganen consumidores solía ser una buena noticia para los olivareros. De hecho, los envasadores siempre se quejaban del poco margen que dejaban las “blancas”.
Un estudio de la consultora AC Nielsen indica que las marcas blancas han pasado de controlar el 63,4% de las ventas de aceite de oliva al 56,8%. También apunta que el Grupo SOS, que posee Carbonell, Koipe y Elosúa, entre otras, tiene una participación del 21,2% en el mercado de la grasa de aceitunas. Se trata de un dato de esta primavera que representa un auge de 7,5 puntos con relación al mes de diciembre. La responsable de este incremento es Carbonell, que pasa de una cuota del 10,6 al 17%. Para entender este aumento se ha de tener en cuenta que las firmas de SOS vuelven a Carrefour —desde mediados de 2009— y que han ajustado los precios para reducir la diferencia. Además, se debe considerar que SOS sufre una caída acentuada desde 2006, que creció con la crisis interna y el cambio de los puestos directivos, por lo que, ahora, le resulta más sencillo caminar hacia adelante.
Por otro lado, el precio del aceite de oliva en origen, es decir, en las operaciones de compra y venta a granel, experimenta un leve repunte. La pasada semana terminó con un valor medio de 1,81 euros por kilo, lo que supone un alivio si se compara con las cotizaciones de las últimas semanas, pese a que aún es un valor que asfixia a los olivareros, ya que siguen por debajo de la rentabilidad. El virgen extra se vende a 2,01 euros, el virgen, a 1,87 y los lampantes, a 1,63.
Información obtenida de:
http://www.diariojaen.es/index.php/menujaen/25-notlocales/23169-las-marcas-propias-de-aceite-de-oliva-ceden-terreno